Perseverancia

Devocional de hoy

Perseverancia

Firmeza y constancia en la manera de ser o de obrar.

“La marca esencial que distingue a un hombre digno de llamarse así, es la perseverancia en las situaciones adversas y difíciles” (Beethoven)

El peligro de perder el amor

Para perseverar y que nuestro corazón no se enfríe, pues puede parar por causa de la maldad, por la tristeza, del desánimo, nos podemos convertir en vírgenes insensatas que pecan por omisión, perdiendo su amor y entrega.
Si perdemos el amor, corremos un gran peligro.

La perseverancia frente al enemigo

El diablo tiene muchas cualidades, como la tenacidad, la constancia.
Perseveremos en la oración, porque si no, corremos peligro, pues, al ignorar la batalla espiritual en la que vive el fiel a Cristo, puede derrotarle el enemigo en esa lucha.

Perseverancia en la oración

Perseverancia en el bien hacer

Bendita la gloria de Dios no la de los hombres, bendita la honra de Dios y su inmortalidad. La gloria de los hombres es como el humo que se desvanece en un instante. La gloria de Dios es participar de la suya, participar de su honra, que es eterna y perfecta.
Perseveremos en hacer el bien, no te canses en hacer el bien, hacer el bien no es solo dar de comer al hambriento, sino hacer bien todo, utilizar nuestras fuerzas en amar a Dios en todo, y hacerlo todo como para Él.

Fruto de la perseverancia

La perseverancia permite cosechar el fruto de la entrega, del servicio, del sacrificio, de la superación de las pruebas.

Permanecer en la bondad de Dios

Romanos 11,22. Mira, pues, la bondad y la severidad de Dios; la severidad ciertamente para con los que cayeron, pero la bondad para contigo, si permaneces en esa bondad; pues de otra manera tú también serás cortado.
Los hipócritas son desgajados, los tibios son vomitados, por no permanecer en la bondad, en la verdad de Dios, por caer en el orgullo, el egoísmo. Dejar al Señor es negarle no haciendo su voluntad.

Permanecer en Cristo

1ª Juan 2, 17 Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre. Y ahora, hijitos, permaneced en él, para que cuando se manifieste, tengamos confianza, para que en su venida no nos alejemos de él avergonzados.
Algunos entran en el camino pero la vanidad del mundo les atrae y se salen de él.
A los primeros seguidores del Señor se les llamaba seguidores del camino, ese que lleva a la vida eterna, es estrecho, angosto y difícil pero en la meta está Cristo con la corona. Algunos no permanecen, y en su venida serán avergonzados por haberle abandonado.

Renovar cada día la entrega

No podemos vivir de las rentas, cada día hemos de renovar nuestra entrega, dejarnos crucificar para vivir con Cristo, y decir como Pablo, ya no vivo y sino que Cristo vive en mi.

Juan 15, 4-7 Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.
5Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.
6El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden.
7Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.

No nos salgamos de la roca, como lapas apretados, como ventosas.
Separados de mí nada podéis hacer.

Alimentarse espiritualmente

Juan 6 , 56 El que come mi carne y bebe mi sangre, en mí permanece, y yo en él.
Para seguir corriendo hasta la meta, hemos de estar bien alimentados, comida sabia y fuerte para poder pelear y perseverar, no podemos estar anémicos espiritualmente. Si has comido la palabra tendrás el tesoro dentro que te saldrá cuando lo necesites.

La gran prueba

En el tiempo futuro será la gran prueba, habrá persecución pero el que persevere hasta el fin…
Mateo 24…el amor de muchos se enfriará pero el que llegue hasta el fin será salvo.

Oración final

Señor quiero vivir perseverando en la oración, en la sana doctrina, en tu gracia infinita. En la manifestación de tu amor, tu generosidad, tu naturaleza, amorosa, compasiva.
Si no es por tu gracia nada podemos hacer no podemos hacernos mejores ni vencer la lucha de cada día pero queremos amarte, agradarte, obedecerte, llegar a la meta, ¿a dónde iremos?? Queremos llegar para recibir tu corona, guárdanos de nosotros mismos.
Revístenos de ti, de tu luz admirable, que seamos tu sal y tu luz en este mundo.