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Guarda Tu Corazón: La Fuente de Vida
Por José Jesús García - Devocional 24 de agosto 2025.

Devocional de hoy
Guarda Tu Corazón: La Fuente de Vida
“Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida.”
Proverbios 4:23
La importancia del corazón
Prestamos más atención a otras partes del cuerpo, el físico, la vanidad, la propaganda ególatra. Dios nos habla mucho del corazón, un órgano vital que descuidamos. El corazón desde que nacemos está bombeando. Y ese corazón se puede engrosar por falta de ejercicio físico y espiritual. Qué atención le damos? Qué nos preocupa? El corazón es engañoso, y esa habitación, sólo la conoce en profundidad el Señor. Ese corazón no es bueno, se nos pegan las durezas y grosuras del mundo que nos contaminan.
La necesidad de la intervención divina
S. Marcos
De nada sirve que llevemos toda la vida en el Señor si Dios no hace esa cirugía y aparta el pecado de nuestro corazón. Que Dios obre en nosotros y nos haga nuevas criaturas de verdad. A veces le damos más importancia a nuestro ministerio, al reconocimiento de otros, al status personal, a lo que piensan los demás de nosotros. Pero a Dios no le podemos engañar. El hombre mira lo exterior pero Dios mira el interior, por eso las palabrerías no valen sino que Dios esté en nuestro corazón para que broten frutos espirituales.
Un corazón conforme al de Dios: el llamado a buscarle en profundidad
Hechos
Hay una falta tremenda de conocimiento de cómo es Dios, cómo es su corazón, nos falta comunión con el Señor para que Él nos revele todo. Busquemos ese tiempo y anhelemos más de Él. Profundizar en su palabra, en su corazón, en su amor, compasión, porque Él es celoso y justo. Deseemos tener un corazón conforme al corazón de Dios y entonces estaremos buscando la perfección.
Un corazón limpio y un espíritu noble: la transformación que solo Dios puede hacer
“Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, Y renueva un espíritu recto dentro de mí.”
Salmo 51
Que no crezca amargura, raíces de miedo, debilidad, envidias, mentiras, engaños que dan lugar a obras de la carne, sino tengamos un corazón limpio. Dile al Señor: “No me eches de delante de ti, Y no quites de mí tu santo Espíritu. Vuélveme el gozo de tu salvación, Y espíritu noble me sustente.”
La nobleza en el Señor no viene por la familia a la que perteneces, no la da un apellido que tienes, sino la da Cristo en ti. Que brote la honestidad de Jesús en ti, y veremos cómo Dios transforma lo vil y menospreciado en príncipes y princesas, porque Dios les escoge y los transforma, y les hace sus escogidos. Hace trasplantes divinos. Así que, si deseamos que esto se produzca en nosotros, limpiémonos cada día, con hisopo santo.
Un corazón nuevo y limpio: la verdadera libertad en el Espíritu
“Esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados de todas vuestras inmundicias; y de todos vuestros ídolos os limpiaré.”
Ezequiel 36:25
Tu palabra será como lavadora para nuestro corazón, y esa limpieza será libertad y sanación para nuestras almas. Que sean quitados todos los ídolos, perjuicios, ataduras de nuestro corazón. “Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne. Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra.”
Oración
Señor, examina mi corazón. Límpialo de todo lo que no te agrada. Quita la dureza, el orgullo, el engaño. Dame un corazón nuevo, sensible a tu voz, lleno de tu Espíritu. Que de él brote vida, verdad y amor. Amén.
