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Escucha Atento la Palabra del Señor
Por Lorenzo Chico - Devocional 27 de Septiembre 2025.

Devocional de hoy
Escucha Atento la Palabra del Señor
Un tiempo de sequía espiritual
Hay sed, estamos viviendo un tiempo de sequía en este país, pero es espiritual, por toda la maldad que está habiendo en todas las áreas y esto trae maldición.
A todos los sedientos: Venid a las aguas; y los que no tienen dinero, venid, comprad y comed. Venid, comprad sin dinero y sin precio, vino y leche. ¿Por qué gastáis el dinero en lo que no es pan, y vuestro trabajo en lo que no sacia? Oídme atentamente, y comed del bien, y se deleitará vuestra alma con grosura. Inclinad vuestro oído, y venid a mí; oíd, y vivirá vuestra alma; y haré con vosotros pacto eterno, las misericordias firmes a David.
Isaías 55:1-3
Cada uno debemos reflexionar en qué dedicamos nuestro tiempo y los pocos o los muchos bienes que tenemos, vivimos de forma rápida y tan apurados que no nos paramos a ver lo que realmente es eterno, nuestra alma, es eterna, para bien o para mal, es eterna. Muchas veces en nuestro afán diario nos olvidamos de conversar con El Señor.
La historia de Marta y María
Aconteció que yendo de camino, entró en una aldea; y una mujer llamada Marta le recibió en su casa. Esta tenía una hermana que se llamaba María, la cual, sentándose a los pies de Jesús, oía su palabra. Pero Marta se preocupaba con muchos quehaceres, y acercándose, dijo: Señor, ¿no te da cuidado que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude. Respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas. Pero solo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada.
Lucas 10:38-42
Marta estaba apurada por atender al Señor y servirle y veía a su hermana sin hacer nada, pero María oía la palabra del Señor y escuchaba con atención. Hay un tiempo para todo y hay momentos en los que el tiempo es estar con el oído y con todo nuestro ser —espíritu, alma y cuerpo— atendiendo lo que El Señor habla.
Hay personas que van a la iglesia, las dos escuchan lo mismo, una sale con gozo y alegría y la otra no recibe nada, ¿por qué es? Porque descuidamos lo más importante: estar con El Señor y recibir de Él, descuidamos morar bajo la sombra del omnipotente.
Beneficios de morar bajo la sombra del Omnipotente
Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré; Le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre. Me invocará, y yo le responderé; Con él estaré yo en la angustia; Lo libraré y le glorificaré. Lo saciaré de larga vida, Y le mostraré mi salvación.
Salmo 91:14-16
Los beneficios que obtenemos si moramos bajo la sombra del omnipotente, tengamos cuidado con los apuros que el mundo y todo lo que hay a nuestro alcance, pues nos llevan al afán de las prisas y no tenemos tiempo para estar a los pies de Jesús e intimar con Él unos minutos, y nos perdemos todo lo que Dios tiene para nosotros. Esto no nos será quitado; dediquemos tiempo al Señor.
La atención en la palabra de Dios
Cómo es posible que vengamos a un lugar, escuchemos lo mismo, y unas personas salgan con gozo y renovadas y otras no, es porque su mente y corazón están en otras cosas.
Nehemías 8:1-12 dice: “Y se juntó todo el pueblo como un solo hombre en la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, y dijeron a Esdras el escriba que trajese el libro de la ley de Moisés, la cual Jehová había dado a Israel..." [texto completo del versículo]
La palabra de Dios no ha cambiado, tiene poder y sigue siendo la misma. En estos versículos dice que estaban “atentos” y no dejaban que nada se les escapara, y dejaban que la palabra hiciera su efecto en sus vidas.
Escuchar con gozo y atención
Dice la escritura que escuchaban con gozo, ¿sales con gozo cuando vas a la iglesia? Hay que saber escuchar la palabra de Dios. En aquel tiempo no tenían biblias individuales; hoy tenemos el privilegio de tener cada uno una biblia o varias en nuestros hogares.
Durante mucho tiempo, los hechos de Génesis a Deuteronomio se transmitían oralmente de padres a hijos. Estaban privados de escuchar la palabra y, en este pasaje, Esdras reúne al pueblo y comienza a leer. Se produce un gran avivamiento.
No puede haber un gran avivamiento si no hay interés por la lectura de la palabra de Dios. Había emoción y todos recibían la palabra con gozo y alegría. ¿Escuchas con interés, con mente y corazón, con expectativas la palabra de Dios?
Prioridad en la escucha de la palabra
Si tenemos ansias de saber más de Dios, nuestra mente se fijará en lo que se lee y nada en el mundo es tan importante como lo que El Señor nos dice. El Señor es digno de recibir toda nuestra atención.
En el momento que me acerco a Él, tengo que aparcar toda preocupación, todo afán, todo el quehacer, y solamente estar por Él, viviendo y recibiendo lo que El Señor tenga para nosotros. Él siempre quiere decir algo a cada persona y quiere convertirnos en testimonios vivos de las maravillosas transformaciones que Él hace. Cualquiera que escucha la palabra de Dios con un corazón y una mente atenta va a recibir de Él.
Oración final
Señor, danos un corazón abierto para escuchar tu palabra, concédenos un corazón generoso para compartir tu palabra a todos los que están a nuestro alrededor, y perdona las veces que el afán y el trajín de cada día nos haga olvidar lo más importante: escuchar tu voz, tu palabra, y que nuestros corazones estén marcados con esa prioridad en nuestras vidas, antes que cualquier otra cosa.
